Así lo afirma el ingeniero Sergio Morales Contreras, titulado del Departamento de Ingeniería Industrial y gerente general de Adexus. “Si hay algo que la Universidad nos aportó fue la diversidad de la sociedad, la transversalidad y el pluralismo. En el día a día, en las empresas y en los negocios, se interactúa y convive con personas de distintos géneros, edades y origen socio económico. La diversidad es lo que en el diario vivir nos toca”, sostiene.
Una brillante trayectoria profesional ligada al área de la tecnología de la información y las telecomunicaciones ha marcado la carrera de Sergio Morales Contreras, ingeniero civil industrial de la U. de Santiago de Chile y gerente general de Adexus, reconocida empresa dedicada al outsourcing de procesos de negocios, tecnologías de la información, comunicaciones y aplicaciones.
Una vez titulado, y tras haber realizado su práctica profesional en la empresa de papeles y cartones CMPC, Sergio Morales comenzó a trabajar en el área de tecnología y ventas, particularmente en evaluación de proyectos. Posteriormente se desempeñó, alrededor de once años, en Unisys Corporation, empresa de integración de sistemas y servicios de tecnologías de la información, primero con cargos en Chile y luego en cargos para la región de Latinoamérica.
“Hacia fines de 2005 y el inicio de 2006 me puse inquieto y empecé a buscar nuevos horizontes. Y me empecé a dar cuenta que había una fusión entre el mundo de las tecnologías de la información y las telecomunicaciones”, recuerda el ex seleccionado de basquetbol de la U. de Santiago.
Con esa perspectiva, Sergio Morales fue convocado a ser parte del proyecto Telmex Chile, del empresario mexicano Carlos Slim. “Era un proyecto de crecimiento muy atractivo y en el cual estuve nueve años. Primero como gerente corporativo de ventas y luego como director de la unidad de negocios empresariales de Claro Chile, empresa del mismo empresario que se fusiona con Telmex”, señala.
“Fue una experiencia de mucho crecimiento en temas transversales de estrategia comercial y de servicios, donde tuve la oportunidad de participar desarrollando nuevas áreas de negocios, mucho manejo financiero y gestión de recursos humanos”, agrega el egresado de la U. de Santiago de Chile.
Su conocimiento y experiencia lo llevó hace poco más de un año a ser parte de Adexus, empresa líder dedicada al outsourcing de procesos de negocios, tecnologías de la información, comunicaciones y aplicaciones, que partió como chilena y que ahora pertenece al holding peruano Graña y Montero.
Primero se desempeñó como gerente comercial y ahora como gerente general, cargo en que está rediseñando la estrategia de negocio de la compañía, buscando lograr un crecimiento sostenido y rentable en el “entretenido mundo de la digitalización de las empresas”, indica.
No es menor el número de años que usted ha dedicado a cada una de las empresas donde se ha desempeñado, contrario a lo que se observa hoy en profesionales con menor experiencia ¿A qué se debe?
Mi estilo, el cual está un poco alejado de la generación de los millennials, ha sido comprometerme con los proyectos en el largo plazo, aprendiendo y creciendo de las distintas etapas de las empresas, y buscando concretar y disfrutar los resultados de mi trabajo. Esto es difícil de lograr en uno o dos años de trabajo.
¿Por qué decide estudiar Ingeniería Civil Industrial en la U. de Santiago de Chile?
Yo vivía en Viña del Mar y obtuve puntaje nacional en Matemáticas. Pensé en ingresar a la U. Federico Santa María, pero mi familia decidió trasladarse a Santiago y entre las opciones, dentro de las instituciones tradicionales con prestigio, obviamente estuvo la U. de Santiago de Chile para postular. Así llegué a la Universidad.
¿Cómo recuerda su experiencia en la U. de Santiago de Chile, en lo que se refiere a formación académica y a vida universitaria?
Tengo muy buenos recuerdos de la U. de Santiago de Chile. Mi vida siempre ha sido una combinación de responsabilidad académica y laboral, con el deporte, y con el entorno social. Siempre he querido hacer convivir esos mundos. En la Universidad lo pasé muy bien, desde el inicio fui invitado a jugar por la selección de basquetbol. Me vinculé rápidamente a la Universidad por el deporte y así me mantuve durante cinco años. También tuve la suerte de formar un muy buen grupo de amigos. En el comienzo amigos que al igual que, venían llegando a Santiago. Luego fui desarrollando nuevas amistades que perduran hasta hoy. Me fue muy bien en lo académico, tuve el mejor promedio de la generación, y logré sacar la carrera en los seis años. También tengo un muy recuerdo del campus universitario, abierto, integrado y diverso.
¿Hubo alguna asignatura de la carrera que haya sido mayormente útil en su desempeño profesional?
Sería injusto decir un ramo en particular, creo que con los años y la madurez uno empieza a preguntarse qué me entrega la universidad, y creo que la universidad nos entregó una forma de pensar, una forma de abordar, analizar y resolver problemáticas. Creo que, de una u otra manera, en los roles que he ido cumpliendo, me ha ido entregando más o menos herramientas, en economía, en investigación operativa, pero por sobre todo en la forma de estructurar la manera de pensar. Eso es lo más valioso que te puede entregar la universidad.
¿En qué medida atribuye lo que ha logrado profesionalmente a la formación entregada por la U. de Santiago de Chile?
Si hay algo que la universidad nos aportó fue la diversidad de la sociedad, pienso que es un tema muy relevante. En el día a día, en las empresas y en los negocios, se interactúa y convive con personas de distintos géneros, edades, religiones y origen socio económico. La diversidad es lo que en el diario vivir nos toca. En la Universidad tuve muy buenas experiencias de esa diversidad, con compañeros que tenían distintos orígenes, experiencias y vidas. En ese sentido es una universidad muy transversal y pluralista, en todo este ámbito. Cada vez nuestro éxito tiene que ver con que somos capaces de poder trabajar en equipos multidisciplinarios, diversos, de ideas y visiones confrontadas.
Desde su experiencia profesional, ¿qué aspectos agregaría o fortalecería para enriquecer el currículo de la carrera de Ingeniería Civil Industrial y la inserción en el mundo laboral de sus titulados (as)?
Ante todo, hay un mundo que tiene que ver con las habilidades blandas. Lo más cercano a eso que yo tuve cuando estudié la carrera fue técnicas de expresión oral y escrita, en que nos enseñaban a hablar en público, si bien esto fue bueno es insuficiente. Hoy en día en las organizaciones cada vez se requiere más relevar la importancia del entendimiento entre las personas, como elemento transformacional de evolución de las empresas para conseguir resultados; el liderazgo como elemento situacional y no jerárquico. Independiente del rol, hay quienes pueden liderar en una organización. En el día a día encontramos ejemplos de personas que pueden no tener personal a su cargo, pero son capaces de movilizar a la organización versus ejecutivos que tiene muchas personas a cargo y no son capaces de mover a la organización. La importancia del liderazgo, de cómo persuadir, cómo influenciar, y cómo interrelacionarnos, es fundamental, y yo creo que eso debe ser una componente fundamental en las mallas curriculares actuales.
Su trayectoria profesional se ha desarrollado en el rubro de la tecnología ¿Qué deben aprender los estudiantes respecto de las nuevas tendencias en este ámbito?
Por lo que me ha tocado ver es importante que los estudiantes comprendan e incorporen en su background que las tecnologías son un elemento transformacional en el quehacer de las organizaciones, tanto en las instituciones de gobiernos como en las empresas. Hoy la tecnología y en particular la digitalización de las instituciones cumplen un rol completamente diferenciador y ya no es una opción. En esto está la diferencia entre las empresas que sobrevivan, se desarrollen o desaparezcan. Quienes entiendan esto serán quienes en definitiva lideren las organizaciones, en un mercado cada día más global e hiperconectado.
Desde esa perspectiva, ¿qué otros aspectos mejorarían la formación de los ingenieros civiles industriales de nuestra universidad?
Las organizaciones están en un cambio constante, apalancado en los procesos. Creo que los procesos son un elemento estructurante del éxito en las organizaciones y debe ser un tema importante en la formación de los estudiantes. Adicionalmente, sería importante que los estudiantes de pregrado pudieran experimentar en sus asignaturas muchos estudios de casos prácticos. Hoy hay mucho más acceso a información para poder dejar un poco la teoría y poder jugar con la realidad, desde la etapa formativa.
¿Qué mensaje entregaría a los estudiantes del Departamento de Ingeniería Industrial?
Deben atreverse a soñar. En la medida que uno sueña puede plantearse metas desafiantes para cumplir esos sueños. Deben trabajar duramente, día a día, de forma muy disciplinada y con compromiso. La pasión con la que enfrenten sus desafíos y “sueños” será la clave del éxito.
¿Cómo definiría en una sola frase al Departamento de Ingeniería Industrial de la U. de Santiago de Chile?
Un lugar alegre, muy cultural y diverso, donde se entregan las herramientas para desarrollarse, competir y evolucionar en el mercado laboral.